¡Hola, hola! Uno de los pasados días de clase, leímos con nuestros alumnos, un cuento en el que aparecían una serie de animales con un determinado oficio. Mediante la lectura de este cuento, nosotras, pretendimos fomentar la comprensión lectora, a la vez que la adquisición de vocabulario. No hemos de olvidar... que ¡nunca viene mal leer!
!Aquí os dejamos el cuento! Más abajo os explicamos la tarea que realizaron los peques después de leer el cuento.
Cuento:
La cerdita Panceta acaba de terminar sus estudios en la
academia de policía. Es la primera policía de su barrio, y todos los animales
que viven allí se alegran mucho. Los padres de Panceta, el señor Chicharrón y
la señora Porcina, están muy orgullosos de su hijita. Por eso han organizado
una gran fiesta en el jardín de su casa.
-¡Enhorabuena, Pance! – le dice su amigo el burro Curro -.
Desde ahora nos sentiremos más seguros en el barrio.
- Gracias, amigo – contestó Panceta -. Yo también me alegré
mucho cuando tú te hiciste barrendero. Desde entonces, nuestra calle está mucho
más limpia.
- Anda, anda, dejémonos de cumplidos y vamos a por otro
zumito de alfalfa, de ese tan rico – propone el burro Curro -.
En la fiesta, todos disfrutan de la comida y de los
refrescos y se divierten mucho. Una pequeña orquesta de ovejas, llamadas Las
Baladoras, toca una bonita canción.
- ¿Bailas Panceta? –le pregunta su vecino el cerdito
Tocinote.
- Pues claro –contesta Panceta -.
- Me alegro mucho de que hayas aprobado el examen de policía.
Yo sigo estudiando para bombero – dice Tocinote -.
- Pronto lo conseguirás porque no hay nadie que se esfuerce
tanto como tú –le anima Panceta.
Cuando acaba de tocar la orquesta, la albañil Toñi, que es
una conejita amiga de Panceta, presenta la última canción. Es el número de la
yegua Yolanda, que se ha disfrazado de payasa y consigue que todos se partan de
risa. Cuando termina su actuación todos le piden a Panceta que hable y como
parece que tarda porque le da vergüenza, todos sus amigos empiezan a gritar: Que hable Panceta... Al final, la cerdita, que se ha puesto colorada como un
tomate, coge el micrófono y dice estas palabras:
- Os agradezco de todo corazón que hayáis venido a esta
fiesta y, sobre todo, os doy las gracias por apoyarme tanto en mi nuevo
trabajo. Contad conmigo para lo que necesitéis.
Todos aplauden con entusiasmo y corren a abrazar a Panceta.
- La tarea que realizaron los niños después de leer el cuento fue la siguiente:
Dividimos la clase en 5 grupos (hay 5 profesiones en el cuento), y le dijimos a cada uno de estos grupos, el oficio al que se dedicarían. Después, les explicamos en qué consistiría su misión. Esta misión fue elaborar un mural sobre la profesión que les tocó, para ello empleamos 3 sesiones, para de esta forma, darles más tiempo para recabar información en libros, enciclopedias o en su propio entorno. Cuando ya tuvieron el mural hecho, cada uno de los grupos explicó en clase todo lo que había encontrado sobre su profesión.
¡Fue muy divertido! ¡A los niños les encantó poder compartir con sus compañeros todos sus conocimientos sobre los empleos!
Además, nosotras como maestras, pensamos que es una buena forma para ir hablando en público, ya que según vayan pasando los diferentes niveles educativos, tendrán que realizar más exposiciones orales.
¡Esperamos que os haya gustado la idea!